Mientras el mediático “empresario” sigue detenido en la cárcel de Ezeiza, el periodista Jorge Lanata reveló que, además de hablar con el psiquiatra Roberto Erusalimsky, el exmarido de Karina Jelinek conversó telefónicamente en, al menos tres ocasiones, con Juan Suris, también detenido y acusado por liderar una banda dedicada a la comercialización de estupefacientes en Bahía Blanca.
En todas las conversaciones entre Suris y Fariña, al igual que éste último con Erusalimsky, aparece el fantasma del lavado del dinero y consejos cruzados para limpiar plata sucia en "conocidas" financieras. El nombre de Propyme, la mutual de Guillermo Greppi entra y sale de la historia en reiteradas ocasiones.
El primo del novio de Mónica Farro, Luciano Gabriel Suris, investigado por la justicia en Bahía Blanca, comparte dos sociedades anónimas: At Cranes Usa Corp y Movil Bahía Inc. con Juan Pablo Lemarchand, un argentino de 61 años radicado en Colombia quien también posee propiedades en Miami.
Desde fines de los años noventa hasta el presente, Lemarchand tuvo bajo su órbita 13 sociedades en el estado de Florida, Estados Unidos. De todas ellas, sólo tres continúan activas y en dos de ellas, el hermano de Suris, forma parte de su directorio. Las únicas fotos disponibles de Lemarchand se pueden encontrar en la red social Badoo y en Facebook.
At Cranes USA Corp fue dada de alta en el año 2009 y continúa activa, al igual que Móvil Bahía Inc, registrada el 19 de julio del 2013, ambas junto a Luciano Gabriel Suris. En otras dos sociedades, aparece Carina Soledad Lemarchand pariente de Juan Pablo: Kapa USA Corp y LCS Investment.
Tanto la familia Lemarchand como el primo de Juan Suris son vecinos en Miami, Estados Unidos. Según los registros de propiedad, Luciano Gabriel Suris es dueño de un chalet en la avenida 107th de la ciudad costera. La propiedad fue comprada en mayo del 2009 a través de la sociedad Tecno International Corp, otra de las sociedades de Juan Pablo Lemarchand dueño de varias casas en la exclusiva ciudad de Miami.
Tanto Suris como Fariña han afirmado, públicamente, tener contactos políticos con las altas esferas del poder kirchnerista. Fariña le confesó a Lanata que jugaba al fútbol con el ex Presidente Néstor Kirchner y que le manejaba la plata al contratista del Estado, Lázaro Báez.
Suris dijo conocer intendentes, funcionarios e incluso al ministro de Planificación de la Nación, Julio De Vido, que desmintió, raudamente el supuesto vínculo al igual que sus posibles vinculaciones con la mutual Propyme de Greppi. No son los únicos funcionarios que estarían involucrados en esta red de lavado de dinero. Una de las propiedades en Miami de Lemarchand figuraba a nombre de una sociedad anónima de Fernando José Horigian.
Según el periodista Diego Rodríguez, Horigian está al frente de decenas de compañías “fantasmas” que se utilizan para préstamos bancarios y espectaculares proyectos inmobiliarios. Horigian es funcionario del gobierno de Daniel Scioli y dirige el CICE –Centro de Innovación y Creación de Empresas- que depende del Ministerio de Producción Nacional de Débora Giorgi. En el 2012, el funcionario también fue nombrado al frente de la Federación Bonaerense de Parques Científicos y Tecnológicos.
Los caminos que emprendieron los protagonistas de esta historia no sólo conducen a Roma. Mientras que algunos viven sus vidas de películas en el país y en el exterior, los padres del colegio Jean Piaget, aguardan una respuesta de parte del psiquiatra salvador, Roberto Erusalimsky, que aconsejaba a Leonardo Fariña cómo valor “90 físicos” horas antes de las últimas elecciones legislativas en el país.
La misma conversación en la que Fariña le decía al psiquiatra que quería llevar la plata al país donde se hace el café. El mismo lugar en el mundo del extraño socio del hermano de Juan Suris. ¿Coincidencia geográfica?
Fuente: Primicias Ya
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