La extrema delgadez de Luciana Salazar es un tema que da que hablar hace algún tiempo, pero su reaparición bajo el foco de atención del Bailando 2015 desató los rumores aún con más furia, por lo que la modelo terminó confesando que no se alimenta bien.
Hace algún tiempo, Luli se tomó el trabajo de responder a las críticas a través de su cuenta de Twitter y aseguró que su diminuta contextura física es una cuestión de pura genética. Sin embargo, el sábado admitió que su alimentación es bastante reprochable:"Tendría que comer más sano", le dijo a Catalina Dlugi en comunicación radial.
La rubia argumentó que se debe a que está siempre "de acá para allá" y entonces come "cosas no tan sanas, por ejemplo papas fritas o cosas dulces".
"Es mentira eso de que no como. Ayer, por ejemplo, comí cinco medialunas y dos empanadas, en medio de los ensayos. Después cené fideos con salsa y de postre unos chocolates. Ahora no estoy más flaca, estoy más marcada", detalló la modelo.
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