Un muchacho de 20 años protagonizó ayer un hecho realmente muy curioso en 27 de Febrero y Dorrego, a una cuadra de la Dirección de Tránsito. El joven estaba dormido, borracho, dentro de su propio auto. En esas condiciones fue encontrado por personal municipal que efectuaba controles de alcoholemia. Y mientras lo evaluaban, explicó sin ruborizarse que estaba esperando porque tenía turno para rendir el examen para obtener su licencia de conductor.
El episodio se produjo alrededor de las 8.30, en 27 de Febrero y Dorrego, a escasos metros de la Dirección Municipal de Tránsito.
A esa hora, personal de esa dependencia que estaba realizando controles móviles de alcoholemia, advirtió que en el interior de un vehículo que tenía el motor encendido había un hombre joven, completamente dormido.
Cuando los agentes municipales se acercaron, despertaron al joven automovilista y lo sometieron a un test de alcoholemia que, según confirmó el director de Tránsito de la Municipalidad, Gustavo Adda, comprobó que tenía "1,56 miligramos de alcohol por litro de sangre", cuando lo mínimo tolerado por la normativa vigente es 0,50.
De acuerdo a relatos de testigos, el conductor dijo que tenía turno para rendir esa mañana en Tránsito para sacar su primer carné de conductor, y que la noche anterior habría participado de una fiesta de fin de año.
Aparentemente la diversión se extendió más de la cuenta y el muchacho aspirante decidió dormir un rato en el auto, a una cuadra de la Dirección de Tránsito, antes de rendir el examen.
"Es una falta grave. El muchacho ni siquiera llegó a rendir. Gracias a Dios se quedó dormido una cuadra antes porque esto podría haber terminado en una verdadera tragedia. No es broma conducir después de tomar alcohol, y menos si estamos hablando de 1,56 por litro de sangre", destacó el funcionario municipal.
Así, por lo pronto el joven deberá esperar para tener su carné.
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