La hija diseñadora de Marcelo Tinelli fue duramente criticada en todo el mundo por el vestido que le hizo a la Primera Dama para su encuentro bilateral con Donald y Melania Trump, que era idéntico a uno de Carolina Herrera.
Cuando presidentes, reyes, príncipes, condes o personalidades importantes se reúnen, el foco no sólo está puesto en lo que ocurre en esos encuentros sino también en las mujeres que los acompañan y los looks que eligieron. Este jueves, Mauricio Macri y Juliana Awada fueron invitados a almorzar a la Casa Blanca y por supuesto, todas las miradas se dirigieron a los outfits elegidos por la primera dama argentina y Melania, la esposa del presidente Donald Trump y primera dama de los Estados Unidos.
Para la ocasión, Melania Trump eligió un diseño de dos piezas en verde seco, con chaqueta con botones, bolsillos frontales y corte en la cadera y una falda por debajo de la rodilla con botones y apertura lateral, ambos ribeteados, que completó con unos stilettos con un print idéntico a la trama de los ribetes. Aunque no le quedaba mal, sencillamente no convenció a los conocedores de moda que, sin embargo, fueron a la carga de Juliana por un tremendo papelón.
Resulta que la primera dama argentina eligió un vestido péplum en tono bermellón con cuello mao y mangas que acompañó con stilettos y sobre a tono. Este vestido fue creado por Ginebra Privé, una línea exclusiva de la marca de Micaela Tinelli y Romina Pigretti... ¡pero era todo un plagio!
El vestido estaba 'muy inspirado' en uno creado por la prestigiosa Carolina Herrera que había lucido la reina Letizia de España en 2016, en la entrega de los Premios Cervantes. La comparación generó un escándalo internacional ya que la impresión que dejó Juliana en el mundo fue que algunos diseñadores argentinos 'plagiaban' a los diseñadores más influyentes... cosa que es cierta, como se demuestra en la siguiente nota.
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