De esta forma, las concesionarias sólo podrán comercializar vehículos sin estos elementos de seguridad en los primeros meses del próximo año siempre y cuando se trate de unidades que estaban en stock.
El ministro del Interior y Transporte Florencio Randazzo anunció el martes que "todas las unidades que salgan a la calle estarán equipadas con sistema de frenos ABS, bolsas de aire en los asientos delanteros y apoyacabezas en los asientos traseros".
Según explicó, el objetivo de la medida es incrementar la seguridad vial: "Desde el 2008 venimos trabajando de manera conjunta con las automotrices para incrementar los niveles de seguridad en los vehículos que salen al mercado".
Otro de los cambios que incorporó este acuerdo con los fabricantes de automóviles es la modernización de los modelos que lancen durante el 2014: "Los modelos que aún no existen, tendrán que incorporar un dispositivo de alerta visual y acústica de colocación de cinturón de seguridad", contó Randazzo.
También anunció que en el 2016 los modelos incorporarán retractores de cinturones de seguridad en los asientos traseros, y que, a partir del 2018, será obligatorio el control de estabilidad del vehículo.
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